Los relatos porno-soft, hardcore y transexuales proponen un abordaje que se aleja de lo erótico-romántico y llega al porno con el acento puesto en una forma de ver y experimentar el sexo, puro y duro fuera del mainstream.
Es súper interesante este espacio de expresión porque se trata de un género asociado a los varones, pero que en la realidad rompe con el enunciador de lo pornográfico históricamente del hombre.
El generar un relato alrededor del sexo, aunque sea una minificción, algunos lo llegan a considerar como un subgénero literario. Lo cierto es que en la web abundan estas propuestas y abarcan una gama amplísima de temas.
«Yo soy una trans madura de 40 años, me hormono desde que tenía 25 así que mi cuerpo ya es muy femenino aunque mis senos son muy pequeños y soy delgada si tengo unas caderas anchas y unas nalgas grandes, soy únicamente pasiva con hombres y casada, a mi mujer si la penetro y ella a mi con un arnés (yo jamás penetro hombres), ella disfruta de qué yo sea su hombre y su mujer también, todo muy lesbian (…)».
Así reza uno de los miles relatos que construye distintas fantasías en el imaginario de lectores y oyentes.
Cuál es el fin de los relatos porno
En los relatos porno/eróticos, la idea disfrutar el mundo de historias de sexo originales. Desde cuentos eróticos y pasionales experiencias reales, hasta elegantes relatos porno y sofisticados juegos sensuales.
Pueden haber escritos sensuales y románticos sobre fantasías, pero también sobre fetichismos, juguetes eróticos y otras formas no tan convencionales de vivir la sexualidad.
“Shibari”: sexo con amarres. Conoce esta disciplina aquí
Hay categorías con las más exquisitas historias swinger, BDSM, tríos u orgías con un inmenso universo temático. A veces, específicas sobre sexo anal, sexo oral, squirting, mujeres u hombres dominantes y sumisos, bondage, técnicas masturbatorias, fisting, pegging, edging, sexo casual o en público…
También pueden ser pedagógicos, sobre el orgasmo femenino, la eyaculación, el masaje de próstata, el sexting o las primeras experiencias. En otras ocasiones, son ficciones o hábitos sexuales que suceden en fechas o sitios clave o simplemente la composición artística-erótica de la autora/autor en cuestión. En resumen, es un universo maravilloso de escritos para lesbianas, gays, bisexuales, héteros…
Algunos relatos
- «A ti que me lees: quiero darte el culo. Sé que, a escondidas, en secreto y clandestinamente ingresas a este portal de relatos y haces fantasías en tu mente, imaginando que eres el protagonista de las mil historias disponibles. / No imagines más: soy una travesti encerrada en mi secreto y nadie lo sabe, y hoy estoy semidesnuda para ti, calzando apenas unas exquisitas sandalias doradas de tacón de aguja, sostén de encaje y una bata rosada transparente levantada hasta la espalda. Mi piel suave y delicada, contrasta delicadamente con los colores de mi ropa. / Estoy en la cama, en cuatro patas agachando la cabeza y esperando que entres en mí (…)»
- «Mi buzón de correo siempre echaba humo cuando una misiva tuya lo llenaba. Así me lo imaginaba. Incendiado. Por el deseo ardiente contenido en cada una de tus palabras. Y el plástico del ordenador derritiéndose cada vez que nos masturbábamos online, el uno frente al otro, sin mediar palabra. Siempre me pedías por escrito que pusiera una almohada debajo de mi culo para que pudieras ver mejor mis dedos desentrañar un coño complejo y mojado. Así nos conocimos. Por internet. Y así decidimos alimentar esta relación.(…)»
- «Desperté por la sensación extraña dentro de mi cuerpo, al parecer ya había amanecido más no sabía la hora. Mi tío dormía profundamente aun, estaba agotado, me moví con cuidado y su pene ahora flácido salió de mí. Podía sentir su semen en la entrada de mi ano, me sentía lubricada. Me moví con cuidado hasta la orilla de la cama para no despertarlo, y caminé al baño. Una vez dentro, me miré al espejo, mi maquillaje estaba totalmente corrido, sin embargo, lo que se veía era el rostro de una chica que acababa de tener una noche loca. Arqueé mi espalda y apreté mi trasero mientras cerraba mis ojos, podía sentir aun el pene dentro de mi, trataba de asimilar el momento. (…)»
¿Te encendieron? Recuerda que el erotismo no puede existir si no es libre, explora sin ataduras y deléitate con las mejores historias de sexo de HOTGO donde no solo las escucharás sino que las verás muy de cerca… ¡Suscríbite!
